¿Estás considerando el empleo de la zapata corrida como punto de partida para tu siguiente construcción? ¡Cuidado! ¡No te decidas por este elemento a ciegas! Si bien puede tratarse de la base idónea para soportar y distribuir la carga de tu estructura, también podría suceder que no sea la solución adecuada. ¡Recuerda que ningún tipo de cimentación es útil para todos para todos los proyectos!
En este artículo te revelaremos 5 puntos cruciales que debes tomar en cuenta antes de optar por este elemento para tu próxima obra. ¡Continúa leyendo y descubre si la zapata corrida es lo que requiere tu edificación!
1. ¿Para qué sirven las zapatas corridas?
Las zapatas corridas, también conocidas como columnetas o pilastras, son cimentaciones continuas compuestas por una parrilla rectangular y una contratrabe a la que van unidos tres o más castillos. Tal configuración les confiere una espléndida capacidad para soportar y distribuir de manera uniforme la carga estructural.
Gracias a este motivo, las zapatas corridas son especialmente empleadas para cimentar las estructuras de la siguiente lista:
- muros de contención;
- muros perimetrales;
- muros de carga;
- muros estructurales;
- construcciones largas (estaciones de tren, naves industriales, piscinas);
- columnas alineadas cuya ubicación sea muy cercana entre ellas;
- edificaciones de varios niveles.
Te puede interesar: Columnas en Construcción: Clasificación Completa
2. ¿Cuándo se utilizan las zapatas corridas?
Las zapatas corridas se suelen utilizar, sobre todo, cuando el suelo en el que se va a llevar a cabo el proyecto no posee una capacidad portante idónea. Gracias a que la superficie de cimentación es más grande en comparación a una zapata individual, se produce una mejor distribución de carga, lo que reduce de forma importante los riesgos de asentamiento.
Asimismo, otro contexto en el que las zapatas corridas son la elección adecuada es en terrenos ubicados en zonas sísmicas, a causa de su gran capacidad para distribuir las cargas y tensiones de manera uniforme durante las actividades telúricas. Esto evita formaciones de agrietamientos, desplazamientos o daños severos en la estructura.
Te puede interesar: Tipos de Zapatas en Construcción: ¡la clasificación completa!
3. ¿Qué profundidad debe tener una zapata corrida?
Si apuntamos a un estimado general, la profundidad a la que debería estar hundida una zapata corrida va entre los 30 y 55 centímetros (cm). Sin embargo, lo más acertado es aclarar que no existe una cifra única respecto a la profundidad de este tipo de cimentación, pues está sujeta a varios factores en el propio contexto constructivo de cada proyecto:
- Cargas de la estructura, incluyendo la viva (ocupantes del mobiliario): a mayor carga, se requiere mayor profundidad.
- Capacidad portante del terreno; conforme se cava, la tierra va mejorando de calidad.
- Nivel freático: si se encuentra cerca de la superficie, la zapata deberá de ubicarse en menor profundidad.
- Normas de construcción tanto locales como nacionales, que a su vez, están sujetas a las cualidades de la tierra de cada desarrollo.
Por ello, te recomendamos siempre seguir las indicaciones del arquitecto o ingeniero estructural a cargo de la obra. Esto con el objetivo de que te aconseje y te dé la mejor guía de acuerdo a los requerimientos específicos de tu proyecto y las características del suelo del terreno de construcción.
4. ¿Cuál es la ventaja de usar zapata corrida?
Dependiendo de las características del terreno y de las especificaciones propias de cada proyecto, una zapata corrida es una de las cimentaciones más eficientes y utilizadas en la construcción a causa de las diferentes ventajas que ofrece a partir de su configuración estructural. A continuación, las enumeramos estos aspectos positivos:
- Distribuye las cargas de manera más uniforme que otras zapatas, lo que reduce los riesgos de asentamientos.
- Reduce la probabilidad de fisuras, pues distribuye las cargas de manera continua y no en un punto concentrado.
- Requiere menor número de excavaciones, por lo tanto, puede ser más económica que otros tipos de zapatas, además de reducir los tiempos de construcción.
5. ¿Qué desventaja tiene el uso de una zapata corrida?
Como todo elemento constructivo, una zapata corrida también puede presentar puntos desfavorables de acuerdo con el proyecto donde se desee implementar. Al respecto, en caso de no tomar las precauciones necesarias, podría desencadenar en un error sumamente costoso y bastante complejo de solucionar. Enseguida, las enumeramos para ti las desventajas de este elemento:
- Mayor complejidad de diseño, lo que implica mayor cantidad de material y mano de obra.
- Menor flexibilidad ante cambios de distribución de carga o condiciones específicas del terreno.
En suma, la zapata corrida tiene sus ventajas y desventajas, por lo que la elección entre este elemento y otra clase de cimentación externa dependerá, sobre todo, de la cantidad de carga, la complejidad del proyecto y las condiciones del terreno donde se desea efectuar el desarrollo.
Zapata corrida detalle constructivo
Para lograr esa distribución uniforme de cargas que la caracteriza, una zapata corrida debe estar integrada por dos armaduras de acero de refuerzo: una base rectangular y una viga horizontal sobre las que descansan tres o más castillos para el levantamiento de la mampostería.
Todo ello amén de una capa de hormigón de baja calidad ubicada sobre el sustrato y otra de concreto armado alrededor de la estructura de soporte. Asimismo, debe presentar una cobertura especial para proteger todos los materiales contra la humedad.
A continuación, te presentamos un esquema sobre el detalle constructivo de una zapata corrida en el que te señalamos los elementos que la constituyen:
- H° de limpieza u hormigón de limpieza: capa de concreto que se coloca sobre el terreno excavado antes de instalar el encofrado y colar el hormigón de la zapata.
- Armadura S/C o armadura simple continua: es un tipo de esquema de refuerzo elaborado a partir de un entramado de varilla corrugada y alambre recocido.
- Armadura Viga Horizontal o contratrabe: es, también, un armado de varillas de acero consolidado con estribos y alambre recocido.
- Encadenado o castillo: compuesto por cuatro varillas metálicas dispuestas en modo vertical, estribos y alambre de acero.
- H°A° u Hormigón Armado: es el concreto que se vierte sobre la estructura de acero de refuerzo una vez que es encofrado.
- Barrera Hidrófuga: es una capa de polietileno o material impermeable que se coloca en la estructura de la zapata para evitar la penetración de agua.
- Mampostería de elevación: es un muro construído directamente sobre la zapata corrida.
En conclusión, la zapata corrida puede ser una opción altamente beneficiosa para la cimentación de tus proyectos gracias a sus propiedades de distribución de cargas que le confiere su configuración contínua. Sin embargo, su elección en lugar de las clases de zapata deberá basarse en un análisis profundo de las condiciones del terreno y las necesidades específicas del proyecto.
Si este contenido te resultó útil e interesante, te invitamos a navegar en el blog de Max Acero Monterrey, donde hallarás más artículos relacionados con el mundo de la construcción y el acero. Síguenos en Facebook e Instagram y descubre consejos prácticos, novedades técnicas, materiales y tendencias en estos sectores. ¡No pierdas la oportunidad de continuar aprendiendo!
