La lámina galvanizada es un material de acero recubierto que podemos encontrar en una variedad de aplicaciones, como en la construcción, en los automóviles o en la fabricación de herramientas y artículos que utilizamos en la vida cotidiana y dentro de los hogares. Si quieres conocer más acerca de este tipo de lámina, aquí podrás encontrar información sobre sus medidas, características y presentaciones para que puedas utilizarla adecuadamente en tu proyecto.
Principalmente, la lámina galvanizada es una hoja de acero Ternium, la cual se somete a un proceso de inmersión en caliente que recubre a la lámina completamente en zinc para protegerla de la corrosión y prolongar su vida útil tanto de la lámina como del producto o proyecto final.
La corrosión que se evita se produce por la exposición de la lámina de acero a otros metales en presencia de un electrolito o al oxígeno y agua. Al colocar una barrera para cubrir el acero, el galvanizado permite resistir de mejor manera las fuerzas destructivas que pueden actuar en contra del acero.
La lámina galvanizada es un material que se encuentra en 3 diferentes presentaciones y por lo cual sus medidas pueden variar:
Para la fabricación de la lámina galvanizada, luego de asegurar el calibre y ancho del material, se pasa a los baños de limpieza con químicos y cepillado, para posteriormente atravesar por el proceso de precalentado y recocido en el horno vertical, el cual garantiza las propiedades que se requieren de troquelabilidad del acero. En seguida se somete al proceso continuo de galvanizado, que se obtiene por inmersión en caliente en zinc, la capa de recubrimiento se controla por boquillas de aire completamente automáticas. Finalmente, la lámina se trata con un incentivo acrílico o aceitado electrostático para su transporte, almacenaje o proceso posterior como el de pintado o pintro.
El acabado galvanizado consiste en un tratamiento electroquímico que se le aplica al acero para proporcionarle una elevada resistencia contra la oxidación. Este procedimiento se realiza por medio de inmersión en caliente a una temperatura aproximada de 450º. Por su parte el recubrimiento de zinc se adhiere químicamente a la base del acero para formar una capa de aleación más dura que el acero, lo que impide que las partes estructurales se debiliten a causa de la humedad, corrosión y atmósferas contaminantes.
Las ventajas que podrás obtener la lámina galvanizada Ternium son las siguientes:
La lámina de acero galvanizada se caracteriza por ser ideal para casetas gracias a su composición y acabados que la convierten en un elemento adecuado para este tipo de construcciones. Asimismo, se trata de un material versátil ya que se puede aprovechar en muros y techos. Otro de los factores que lo destacan son su alta resistencia a condiciones poco favorables, sin mostrar indicios de degradación.Así como su garantía extendida gracias al material con el que está fabricado.
En lo que respecta a los usos de la lámina galvanizada se puede aprovechar en diferentes sectores, tales como en la construcción, en el sector automotriz y en la fabricación de herramientas. Así como también se utiliza:
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Tanto la composición como acabados, hacen de este un elemento perfecto para la construcción de casetas.
Es un producto altamente versátil en su uso, puede aprovecharse tanto en techos como en ‘paredes’.
Resiste condiciones poco favorables sin mostrar indicios de degradación por su material anticorrosivo.