Presta atención para saber qué hacer en caso de un sismo y recuerda que en México contamos con un sistema de alerta anticipada que puede permitirte actuar con unos pocos segundos de anticipación, poco más de un minuto en el mejor de los casos, pero no siempre es tiempo suficiente para salir así que estos son consejos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés) que aplican para la mayoría de los escenarios.
SI ESTÁ DENTRO, QUÉDESE DENTRO. SI ESTÁ AFUERA, QUÉDESE FUERA: La probabilidad de sufrir lesiones es menor si permaneces en tu lugar durante un sismo. Procura moverte SOLO para alejarte de vidrios u objetos que puedan caer. Protege tu cabeza con las manos o con algún objeto cercano.
Si estás fuera quédate en áreas abiertas, muévete para alejarte de cables, postes, tuberías y edificios, pero evita colocarte en zonas con flujo vehícular.
AGÁCHATE: colócate en el suelo apoyado en manos y rodillas, hazlo antes de que el sismo lo haga por ti. En esta posición evitarás caídas, pero te permitirá moverte de ser necesario. Si no es posible agacharse, haz lo posible por sentarte en el suelo.
CÚBRETE LA CABEZA Y EL CUELLO: cubre todo el cuerpo de ser posible, pero en especial el área de la cabeza y el cuello, puedes hacerlo metiéndote debajo de una mesa o un escritorio resistente, también te puedes resguardar junto a muros de carga o muebles de poca altura.
AGÁRRATE: si es posible aférrate al lugar de resguardo (mesa, sillón, etc.) hasta que pase el temblor y prepárate para moverte cuando todo termine.